Desde hace tres meses la vida ha cambiado infinitamente bajo una capa de normalidad.Esta situación nos ha trastocado todo.
Nada es como antes, como a lo que estábamos acostumbrados... Hemos tenido que acomodar nuestros hábitos a las reglas que imperan: mascarilla-lavado de manos-aire libre-distancia...
Pese a todo, las personas intentamos establecer unas pautas que recuerden algunos actos que regían nuestro el día a día antes de que el virus pasara a ser algo frecuente en el entorno.
Algunos piensan en el verano, otros hacen planes para volver a sus segundas residencias; ciertos han vuelto a practicar su deporte habitual; unos cuantos se sientan en la terraza de un bar a disfrutar de un rato de tertulia con una caña fresca enfrente...
Y yo pienso en que hoy se daba como inaugurada la temporada estival con la noche de San Juan. Fuego, hogueras, playa al atardecer, verbena... ¡Ah, qué lejos quedan!
Pero no renuncio a señalar que el veintitrés de junio es el día más largo del año, al que sigue la noche del solsticio de verano, que aunque en realidad sea el veintiuno de junio, se considera la noche más corta.
Así que celebremos hoy la especial noche de San Juan con este canción, La Noche de San Juan de La Bullonera, que me ha enviado una amiga:
-Margalló-
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