San Valero, rosconero y ventolero...

Aunque creo que este año no lo es. Está haciendo un tiempo en todo Aragón muy bueno.
Así podrán disfrutar los zaragozanos de su Santo Patrón y de su día festivo.
San Valero, fue obispo de Zaragoza. Murió un 29 de enero del año 315, en un pueblo del Pirineo, a donde lo habían desterrado.
Los niños y mayores comerán su roscón tranquilamente. Y habrán podido ir a ver los cabezudos sin que se los lleve el aire.
Desde 1942 parece que se retomó la costumbre de repartir roscón en la Plaza del Pilar, aunque según se cree ya era una costumbre en la Edad Media.
Me despido con otro refrán muy verdadero sobre San Valero, ya que a finales de enero el día ya tiene más horas de luz:
"Por San Valero,
más día que a primeros."

-Jedrea-