miércoles, 24 de agosto de 2016

Viaje norteño:de Cobárceno, a Santillana del Mar y Torrelavega

Este viaje nos llevó al Parque Natural de Cabárceno, a Santillana del Mar, y por último , a Torrelavega. Es decir que recorrimos tierras santanderinas o cántabras, como dicen ahora.
Salimos de Teruel con Automóviles Zuriaga, a Cabárceno.
Este parque está situado en el Valle de Pisueña. Cerca de Solares, de Astillero...En el mapa lo he marcado con una estrella rosa.
Fue una mina de hierro. En la hondonada que se formó al quitar el mineral, fueron dejando algunos montículos, como Los Monotes en las arcillas de Teruel. Allí han creado un parque.
Han aprovechado su paredes verticales, para que no se escapen los animales.
En ese espacio, que es muy grande, conviven, en semilibertad, infinidad de animales: osos, rinocerontes, jirafas... En fin, creo recordar que había casi 100 clases de animales.
Solamente los avestruces campan por arriba, cerca de las vallas de alambre, y nos advirtieron que sobretodo tuviéramos cuidado con las gafas, porque te pegan un picotazo y se las llevan.
Merece la pena visitarlo.
Nosotros, cuando fuimos, estaba pariendo una jirafa; compramos cacahuetes para darles a los monos que andan sueltos en un recinto, y tienen una habilidad que para qué para sacar el fruto... ¡Ah! y cuidado con los bolsos que te los agarran y se los llevan.
De allí fuimos a Santillana del Mar, en el valle del Besaya.
A este municipio se conoce como el nombre de las tres mentiras, pues ni es Santa, ni es llana, ni tiene mar.
Los viajeros del autobús nos repartieron en dos hoteles. los que estábamos en nuestro hotel , comentábamos que olía de vaca, y es que tocando había una vaquería.
Nos prepararon un desayuno y con la leche riquísima. Toda vida me acordaré, ¡qué leche! Si yo compro la entera y comparada como aquella esta es agua.
En una calle había una mujer que vendía vasos de leche y una cosa como madalena. Me parece que le llaman pasiegos.
                              
Es una ciudad que vive mucho del Turismo.
Lo que sentimos fue no poder ver las Cuevas de Altamira. Las descubrió Marcelo Sanz de Santuola, en 1879; y que las llaman la Capilla Sixtina del Arte Rupestre.
Desde el año 2013, Santillana, forma parte de los pueblos más bonitos de España.
Tiene una colegiata, la de Santa Juliana. Fue fundada por unos monjes en la Edad Media. Toda de piedra y se mantiene por donaciones.
Tiene un hórreo de 35 metros de largo, por 4 de ancho.

No recuerdo si fue aquí, que nos enseñaron la biblioteca, y yo me fije que había gateras. Pregunté porqué estaban, y es que los ratones se comían las tapas de los libros. Para evitarlo, tienen gatos por los recintos. 
Los libros son verdaderas obras de arte, de escritura y escenas de la Biblia.
Santillana es   Tiene un edificio muy bonito llamado Torre de  Don Borja.
En esta población conviven diversos estilos: medieval, renacentista, barroco...
Existen muchos escudos heráldicos en sus fachadas.
La mayoría de las casas, todas de piedra, fueron construidas gracias al dinero proveniente de América.
Yo, lo que si vimos fueron muchas bueyes enganchados a los carros.
Una noche hicieron una quema de vino... luego le pegaron fuego. Durante la queimada vas y pronuncian unos conjuros, ¡¡que para su padre!!, porque no se entiende nada de lo que dicen.
Ahora, eso si, el vino estaba bueno.
Luego rifaron una jarra, con sus correspondiente tazones, para hacerlas en casa.

Torrelavega, corresponde a la comarca del Besaya, porque está situada en un valle que forman el río Saja y el Besaya.
En la Edad Media aparecen los primeros escritos de la villa, llamada entonces Aldea de la Vega.
Su nombre actual está formado por estas palabras: de la Torre que mando construir por Dª Leonor de la Vega , hija de Garcilano de la Vega II. Esta mujer es importante porque es la madre del poeta Marqués de Santillana, Íñigo López de Mendoza, autor de Las Serranillas, muestra de la poesía española trovadoresca.
María Cristina de Habsburgo Lorena  y le otorgó a Torrelavega el título de Ciudad en el año 1895.
Pero la visita fue corta. De aquí no puedo contar nada, porque solo nos llevaron a ver su feria de ganados, que había unas vacas ¡¡con unas ubres!! 
Decían que producían 21 litros de leche.

Y, de allí, a montar en el coches y ¡a casa!
-Pensamiento-

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