miércoles, 15 de octubre de 2014

Actividades en el balneario 5: Otra charla

El Dr. Joaquín Guillén impartido una charla sobre "Salud y aguas termales".
La sala ha completado su aforo, y ha seguido sus palabras con toda atención. 
Apoyando su disertación con imágenes, ha explicado las características de las aguas mineromedicinales: aguas de caudal continuo; a una temperatura fija e inmutable, y  casi siempre elevada;  además de una mineralización constante.
 Balneario Serón -Jaraba- Zaragoza
Según los minerales disueltos en ellas, las aguas pueden considerarse:
$.- Sulfuradas, con su característico olor a 'huevos podridos', ya que el azufre que contienen está en forma de gas. Excelentes para la piel y el aparato respiratorio.
Se encuentran en el Pirineo: Panticosa, en el Manantial Tiberio; también las de Caldas de Boi...
$.- Cloruradas, contienen cloruro sódico -sal-. Son estimulantes. Aceleran una recuperación  ya iniciada en su proceso, por ejemplo, como complemento en la rehabilitación de un esguince.
Se pueden disfrutar en Fitero, Navarra.
$.- Sulfatadas, con azufre en forma de sal, son estimulantes de la digestión, e indicadas para temas relacionados con el aparato digestivo: vesícula, estreñimiento...
¿Quién no conoce el Agua de Carabaña -Madrid- ?
¿Y el Balneario de El Paraíso? En Manzanera, en Teruel. [Este nos pilla más cerca]
También tiene este tipo de aguas el de Cestona, en Guipuzcoa.
$.- Bicabonatadas. Estimulantes de la digestión, neutralizan la acidez. 
Entre ellas se encuadran la reconocida Agua de Vichy, de Caldas de Malavella -Gerona-
$.- Ferruginosas, llevan hierro disuelto. Actualmente no hay ningún balneario en exclusiva, con este tipo de aguas, porque es necesario estar a pie de manantial unos dos meses para que sean eficaces y eso, hoy, no resulta eficiente.
$.- Radioactivas. Lo son todas las aguas mineromedicinales, porque vienen de la profundidad de la tierra. Contienen Radon 222, isótopo, en forma de gas, que tiene unos tres días y medio de vida. Su acción no es acumulativa. 
Son aguas sedantes y relajantes. Estupendas para gente nerviosa.
Famosas las de Alange -Badajoz- y La Ermida, -Cantabria-.
$.- Oligometálicas. Llevan poca sales disueltas, en comparación con otras aguas mineromedicinales, menos de un gramo.
Son aguas diuréticas. Ayudan a limpiar el organismo.
Así son estas de aquí, de Jaraba. También las de Vilas de Turbón, en Huesca.
$.- Cálcicas hipertermales. Aguas relajantes de la musculatura y, en general, actúan sobre todo el organismo.
La exposición ha continuado con la historia de la balaneoterapia:
   Parece que las termas más antiguas encontradas han sido las de Mohenjo Daro, en Pakistán, unos 2000 a Xto. Es decir, hace unos 4000 años.
En Tell er Amarna, la famosa ciudad de Akenaton, se demuestra que los egipcios hacían uso de estas técnicas. Epidauros demuestra que los griegos, fueron sus continuadores.
Los romanos fueron los primeros que diferenciaron la balneoterapia de los spa: Lugo y las termas de Caracalla, en Roma, marcan las características.
Árabes y turcos continuaron con la utilización del agua en su vida cotidiana.
La balneoterapia renace en el siglo XVIII, con la figura de Sebastián Kneip, que preconizaba una ordenación de la vida, haciendo ejercicio e impulsando el poder curativo del agua.
Pero no fue hasta finales del siglo XIX y principios del XX cuando se produce el esplendor de los balnearios.
La decadencia se produjo entre los años 30 y 70 del siglo pasado, volviendo a tener un resurgimiento con los programas de Termalismo Social, que completan la cura hidropínica, el beber las aguas, con otros usos: baños, chorros, duchas...e hidrocinesoterapia, hacer ejercicios, fisioterapia, masajes... en el agua y como complemento de una cura balnearia.
Ha sido una conferencia muy interesante y amena. He intentado resumir los puntos principales y más novedosos para todas las personas que estamos integradas en este tipo de programas.
-Margalló-

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