lunes, 20 de marzo de 2017

I Congreso en Castillo de Locubín (Jaén)

El pasado día 17 de marzo asistí al congreso celebrado en mi localidad, organizado por profesores, la mayoría   jubilados.
En total intervinieron doce ponentes. Se trataron  temas relacionados con la historia del pueblo, desde que se tienen  datos.
El ponente D. Manuel Peñalver Castillo, Catedrático de la Universidad de Granada, disertó sobre los orígenes   de nuestro  pueblo.
Como cualquier  vecino, quedé sorprendido al saber que, en un libro de Juan Mena, aparece el nombre como Castillo de las Cuevas publicado en 1482, en una rima  castellana.
Así mismo puntualizó otros textos del diccionario geográfico-estadístico de Pascual Madoz de 1861.
Otro ponente, D. Daniel Peinado Navas, médico en ejercicio, expuso sobre la medicina en el siglo XX en nuestro pueblo.
Anteriormente a esta época no se tienes noticias de existir médico en la localidad; solo curanderos,  mujeres que asistían como comadronas y  barberos  que extraían piezas dentales   y pequeñas cirugias. No fue hasta finales del siglo XIX que llego el primer medico aportando  su salario el propio ayuntamiento, cuyo montante era de unas 300 pesetas anuales.
En la actualidad, existe un cuadro médico compuesto de tres médicos de atencion primaria,  así como un pediatra.
Otro tema importante fue protagonizado por D. Miguel Contreras Jiménez, actual empresario de viajeros por carretera, sobre sobre los comienzos del transporte público en la localidad, para hacernos una idea de penuria de los comienzos, señalar que viajar de Castillo a la capital , a Jaén se tardaba  ¡¡4 horas!!, siempre  que el vehículo no se averiara, funcionaba con gasolina y gasógeno.
Debo resaltar que en la actualidad un vehículo medio tarda  40  minutos en realizar el recorrido mismo recorrido.
Otro tema importante fue la educación, o los deportes... Los primeros equipos de fútbol se desplazaban para disputar los partidos, primero, andando a los pueblos pueblos cercanos, más tarde ya fue en bicicletas.
Me llamó poderosamente la atención un ciudadano, natural del pueblo, D. Antonio, invidente de familia superhumilde, que por ambición de prosperar pidió a su familia que le dejasen marchar  a la capital. Eso me dio que pensar: Siempre ha habido personas decididas y emprendedoras en mi pueblo.
A ver si no se queda toda esta información en la transmisión oral. Sería estupendo contar con una publicación que recogiese todas las ponencias.
-Olmo-

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