Tenerife. Una palabra de origen guanche. Parece que se deriva de Tener, 'nieve' + Ife, 'monte
alto'.
El poeta griego Hesíodo decía que las islas Canarias era El
Jardín de las Hespérides. Ese huerto de la diosa Hera, en el oeste, donde las ninfas
cuidaban del árbol de las manzanas doradas que daba la inmortalidad.
Otro poeta griego, Píndalo, las
llamó las Islas Bienaventuradas.
El escritor latino Plinio El Viejo la nombraba como Nivaria, por su enorme montaña
nevada, el Teide, ese cono volcánico que tiene 3.718 metros de altitud, el pico
más alto de España.
Para mi, como para otras muchas personas, es un lugar de disfrute, de descubrimientos y de vacaciones.
Es mi segundo viaje a Tenerife.
Os voy a contar un poco de esa tierra.
Una
isla, en medio del Atlántico, cerca del trópico de Cáncer, en frente de las
costas africanas, en frente del desierto Sahara.
Es
una zona turística donde hay turistas de todas nacionalidades.
Estuve al oeste de la isla, una zona que se llama Los Gigantes.
Es una experiencia muy hermosa.
-Romero-
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