miércoles, 7 de octubre de 2015

Octubre, vendimia y mosto

Como cada otoño, y debido a la buena acogida que está teniendo el vino de mi cosecha, entre los que lo han probado,  me pongo manos a la obra, siempre con la ayuda de familiares.
Primero la vendimia. Unos racimos hermosos, tanto los blancos como los negros.
Luego el posterior traslado al espacio preparado para la faena:
                    

Echamos los racimos a la despalilladora, una y otra vez, para dejar la uva bien limpia y abierta. Luego, posteriormente, la estrujamos  en la prensa y el caldo, el mosto, se escurre al recipiente... Ese zumo de la uva, con la fermentación, se transformará en mi famoso vino, de color ambarino:
          
     Como se aprecia en las fotos,  la cosecha fue buena. Y según los entendidos, al llover muy  poco o nada desde abril,  debe  salir  un buen caldo. 

Para estos días de vendimia y recolección se presentan adecuados algunos refranes referentes al vino:
"Donde el vino entra la verdad sale."
"Alababa al vino que lo ponía en las nubes,
pero no lo dejaba mucho para que no se aguase."
"Quien no fuma ni  bebe vino,  el diablo lo lleva por otro camino." 
                              ¡¡A tomarlo  con gusto!!
-Olmo-

1 comentario:

  1. Muchas gracias por compartir con nosotros tus experiencias de vendimiador.
    Viviendo en la ciudad, a veces, olvidamos que la naturaleza nos ofrece maravillas todos los días. :D

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