Otra de torrijas:

La entrada de Pensamiento me ha hecho escribir otra a mi.
Es verdad que las torrijas son un plato tradicional, que viene de antiguo, la prueba es esta imagen que he tomado de libros de cocina antiguos que guarda mi madre:

En este caso la cocinera soy yo. 

Yo hago este postre varias veces al año, puedes picar en el enlace si quieres ver cómo hacerlo.

Pero, claro, nunca pueden faltar en Semana Santa. Además, yo, soy muy de explorar y crear en la cocina.

Esta vez he hecho torrijas borrachas. Por supuesto que el nombre lo he inventado yo. 

En un plato he puesto rebanadas de pan del día anterior.

Las he regado con vino espirituoso: un licor de avellanas. Las he dejado empapar, una media hora.
Después he seguido el proceso habitual...
Primero mojar en huevo batido.
Luego, rebozar en harina.
Y, por último, freír en abundante aceite de oliva virgen, bien caliente.
Colocar sobre una fuente, una vez que estén doradas, y endulzarlas con un una cucharadita de miel.

Así ha quedado el plato:

-Margalló-