La palabra 'rosa' tiene un origen antiguo, pero incierto.
Quizás es probable que haga referencia al color fundamental de esta flor.
En cualquier caso, no cabe duda de que las rosas merecen considerarse las 'reinas de las flores'.
Los poetas la han tratado como tal, como por ejemplo Juan Ramón Jiménez en su poema La flor solitaria -Poemas agrestes, 1910 a 1911- donde le otorga adjetivos que la dibujan como flor orgullosa:
(...)No vienen en tu busca, pobre flor solitaria;
-y, sin embargo, eres más bella que la rosa
pregonadora, que la mano partidariadel destino abrió altiva, visible y victoriosa-.(...)
-y, sin embargo, eres más bella que la rosa
pregonadora, que la mano partidariadel destino abrió altiva, visible y victoriosa-.(...)
También las rosas fueron amadas por los pintores del comienzo del siglo XVIII y aparecen en numerosas obras de los maestros holandeses, franceses...
Puedes picar en la imágenes para conocer los pintores que las dibujaron.
Pero a mi me gustan más las que crecen en mi huerta. Son insuperables por su infinita variedad de forma, colores y fragancias... Ellas merecen mi atención y cuidado permanentes.
-Olmo-
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