El fin de semana casi siempre lo dedicamos a hacer alguna cosa especial.
Mis razones son variadas:
🎶El acto de cantar hace que el cuerpo libere endorfinas, esas sustancias producidas por el cerebro, y que están asociadas al placer.
🎶Cantar obliga a hacer respiraciones profundas, aumentando el flujo sanguíneo en el cuerpo, favoreciendo la circulación de esas pequeñas proteínas, las endorfinas.
🎶El canto puede ayudar a activar la voz. Es decir, con esos ejercicios específicos de proyección y de modulación de la voz pueden ralentizar el deterioro vocal que puede producirse en las personas de edad.
🎶El canto y la música son actividades que favorecen la memoria, ya que pueden evocar momentos vividos en el pasado, sobre todo si han sido significativos.
La melodía actúa como elemento facilitador puesto que la parte del cerebro dónde se almacenan los recuerdos sirve como punto de unión entre la música y la memoria.
Los tonos musicales activan el sistema nervioso, estimulando las paredes del cerebro.
Todos los sonidos que se escuchan permanecen archivados en el cerebro, y esto ayuda a activar las neuronas cada vez que se repiten.
Es por todo ello que esta tarde he asistido al Taller de voz impartido por Mari Carmen Muñoz, profesora de canto en el Conservatorio Profesional de Música de Teruel.
Ha comenzado lanzándonos una pregunta: ¿Dónde guardamos el aire?
La respuesta ha sido unánime: En los pulmones.
Pues en ellos hemos de meter el aire necesario para emitir el canto.
Hemos aprendido la postura más adecuada para expresarnos con el canto:
De pie, con las piernas rectas, bien apoyadas en el suelo; los brazos, a lo largo del cuerpo, para mejorar la expansión de los pulmones.
Y así hemos practicado distintos ejercicios:
📎Coger aire y soplar una vela imaginaria para hacer oscilar la llama solo existente en nuestra imaginación, sin hacer ruido, hasta vaciar totalmente nuestros pulmones.
Una buena capacidad de fiato permite sostener las notas o emitir toda una frase sin tener que tomar aire, sin por ello perder fuerza ni expresividad.
Es preciso conseguir que los músculos que protegen las costillas estén fuertes y relajados para aumentar la cantidad de aire que entra en los pulmones, y que el diafragma baje lo más posible para ampliar la capacidad pulmonar.
📎Rotar el hombro izquierdo hacia delante. Repetir el ejercicio con el derecho. Unas 8 veces cada uno.
📎Rotar el hombro izquierdo hacia detrás. Repetir el ejercicio con el derecho. Unas 8 veces.
📎Rotarlos dos hombros a la vez: 8 rotaciones hacia delante; 8 rotaciones hacia atrás.
La dinámica corporal es importante en el canto.
Echar la cabeza hacia atrás, con las manos protegiendo la nuca, para evitar lesiones.
Comprobar como todos los músculos del cuello, incluso los laterales, están relajados, sin tensiones.
¿Dónde resuena?
hemos de tener en cuenta que la voz es el instrumento más antiguo.
El sonido debe salir natural.
Y ya hemos pasado a poner en práctica lo aprendido: Cantar canciones.
Lo primero es leer la partitura. Observar qué parte corresponde al canto y cual a instrumentos.
La concurrencia éramos muy variada, y el repertorio ha respondido a los diversos intereses.
Dejo aquí enlaces a los vídeos por si tienes curiosidad y quieres escuchar los temas que hemos cantado.
Cruella de Vil, de la película de 101 dálmatas.
Doeba, un canon en swing, de Rieks Veenker. Este ha sido mi favorito, porque hemos apoyado la voz con sonidos producidos con las manos.
Hallelujah, tema de Leonard Cohen, que aparece en la película de Sherk.
En esta actividad he llegado a una conclusión: no es necesario tener una gran voz para disfrutar con el canto.😄
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