Viajando hacia el oeste: Portugal -VI-

Nuestro viaje hoy va dirección Oporto.
Salimos del  hotel alas 9 de la mañana cuando llegamos a Oporto nos estaba esperando la guía y con el autobús nos hizo una visita, recorriendo prácticamente lo más importante de la ciudad y nos dejó en la plaza del Ayuntamiento, donde nos recogería a las 5 de la tarde.
De modo que nos quedamos por el centro de la ciudad paseando y buscando restaurante para comer.
Tuvimos mucha suerte. Encontramos un sitio pequeñito  en el que comimos muy bien. Comida casera muy rica. ¡De segundo teníamos el tradicional bacalao de la casa. Estaba riquísimo. El postre, excelente, una tarta de queso muy rica. Y encima muy pero que muy económico.
Para rebajar la comida, nos fuimos a pasear buscando la calle de Santa Catalina y unas calles peatonales, con muchas tiendas.
En el recorrido también vimos el café más antiguo de Oporto.
A la hora que acordada, al autobús para dar un paseo en barco, en la desembocadura del río Duero.

Este paseo estuvo muy bien, porque también entraba una visita a una bodega de vino. Pero esto fue un decepción😨: entramos creyendo que nos iban a enseñar una bodega, pero de eso ¡nada ! Entramos, nos sirvieron una copita de vino, con una explicación  mínima de cómo se elaboraba el famoso vino y ¡hala! ¡aire! ¡a la calle! 😟Con mal humor de ver la estafa que nos habían hecho al autobús y al hotel. Prometen, pero luego no cumplen. Así no van a vender el famoso vino de oporto, más que a los ingleses...😴 Nos fuimos de la ciudad con un regusto amargo.

-Jedrea-