Las vacaciones en la costa:

Las localidades costeras son elegidas por muchas personas para pasar las vacaciones.
¿No te gusta nadar? ¡No importa!

Solamente con acercarte a la costa, ya tienes efectos positivos para la salud.😃
La brisa está cargada de iones negativos, generados en entornos naturales con corrientes de agua: ríos, cascadas o el mar...

Si estás cerca de un entorno de estos tu producción de serotonina aumenta.

¡Y mira que este neurotransmisor influye!
Influye en el buen humor, en tener un sueño reparador, en serenarnos, en relajarnos...

A 100 metros del mar, el aire contiene 50.000 iones negativos en cada metro cúbico.
Así que conforme te vas aproximando a la orilla esa cantidad aumenta porcentualmente.

La brisa que sopla durante el día, el aire cercano al mar, contiene oxígeno, ozono, y otras sustancias minerales: cloruro de sodio, bromo, yodo, magnesio, sílice...

¡Y ya no digamos nada si te bañas!

Entonces no sólo inspiras estos elementos, sino que te sumerges en ellos.

Oligoelementos que el cuerpo necesita para funcionar, además del zinc, el potasio o el hierro que contienen las aguas...
¿Te has sumergido en el mar? 
Estamos en verano. En tiempos de calor siempre es un buen sitio para refrescarse.
¿Has pensado en acercarte algún día a la playa?

Tu sistema inmunitario se reforzará. Tu sistema emocional y psíquico recuperará su equilibrio.

¿Eres de los que tiene dificultades de movilidad? Pues respira. Sólo respira.

Y verás como solo esa acción ya te tranquiliza. O pasea cerca del agua.
¡¡Ánimo, y aprovechar del buen tiempo!!

-Margalló-