Con el toro de la soga y baga.
Hasta 1927 o 1928 se bajaba desde la vieja plaza de toros de San Cristobal, situada en el actual Barrio de San León y declarada en ruina en 1929 el toro ensogado, primero uno y luego el otro. Eran encerrados hasta la tarde en el corral de la Vaquilla o corral de Aguilar. Allí amarrados eran curados de las heridas de banderillas.
Por la tarde se sacaban ensogados en la Plaza del Torico, para volverlos al corral,después de un pequeño descanso, con merienda, en la plaza del Seminario.
Los volvían a sacar, y luego los dirigían por la calle del Tozal al matadero.
Hacia los años cuarenta del pasado siglo, la Vaquilla volvió a resurgir. Los toros ya no se encerraron más en la Plaza del Seminario. Se hacía en la Nevera, que era el Matadero Viejo.
Y desde finales de esa década se empezaron a correr los cuatro toros actuales.
Ahora, desde 1992, se regula por un Reglamento Regulador de la Soga y Baga de la Vaquilla del Ángel.
Nosotros, la Peña El Agüelo, por la mañana, animamos la fiesta con nuestro particular toro ensogado.
Lo paseamos por las calles, para disfrute de nuestros peñistas y de la chiquillería de la ciudad.
De esta manera contribuimos a mantener la tradición de recorrer la ciudad con el toro ensogado. ;D
En el programa de Fiestas de este año, Paco Gómez Sobreviela cuenta la historia de esta
tradición.
La primera referencia aparece en el Alcorán, o Libro Verde de la Ciudad. Allí
se explica que "...el sábado como tengo dicho, a las cuatro de la tarde se corrió un toro ensogado por la ciudad...". Eso era el 31 de agosto de 1679, con motivo del casamiento de Carlos II y Mª Luisa de Orleans.
Posteriormente, los turolenses, en el día de San Cristóbal, el 10 de julio, iban en romería hasta la ermita del santo, en la carretera Alcañiz y "se corría ensogado y embolado un toro llamado el todo de la ciudad que llevaba una estrella en el testuz y una mantilla con toretes y estrellas bordados".
Por la tarde se sacaban ensogados en la Plaza del Torico, para volverlos al corral,después de un pequeño descanso, con merienda, en la plaza del Seminario.
Los volvían a sacar, y luego los dirigían por la calle del Tozal al matadero.
Y desde finales de esa década se empezaron a correr los cuatro toros actuales.
Ahora, desde 1992, se regula por un Reglamento Regulador de la Soga y Baga de la Vaquilla del Ángel.
Nosotros, la Peña El Agüelo, por la mañana, animamos la fiesta con nuestro particular toro ensogado.
Lo paseamos por las calles, para disfrute de nuestros peñistas y de la chiquillería de la ciudad.
De esta manera contribuimos a mantener la tradición de recorrer la ciudad con el toro ensogado. ;D
-Romero-
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